lunes, 12 de noviembre de 2012

De los 400 golpes a las 800 Balas

El tema común de ambas películas se sintetizar en un lugar común, el agandalle del mas fuerte.
La destrucción social-ambiental de México
Gilberto López y Rivas
Apartir de hoy, viernes 9 y hasta el domingo 11 de noviembre, tendrá lugar en el municipio autónomo de San Francisco Cherán una importante reunión conjunta en la que se articulan la preaudiencia del Tribunal Permanente de los Pueblos-Capítulo México sobre la Devastación Ambiental y Derechos de los Pueblos en el Estado de Michoacán y la Octava Asamblea Nacional de Afectados Ambientales (ANAA), que constituye un espacio de convivencia no sujeto a instituciones del Estado ni a partidos políticos, de más de 130 luchas locales con presencia en por lo menos la mitad de los estados de la República: Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Veracruz, Puebla, Tlaxcala, México, Morelos, Jalisco, Guanajuato, San Luis Potosí, Sonora, Nayarit, Chihuahua, Quintana Roo, Distrito Federal y Michoacán.
Que Cherán sea sede del evento constituye un reconocimiento solidario por parte de los representantes de pueblos y organizaciones sociales del país a esta emblemática lucha autonómica purépecha, que se genera a partir de sus formas organizativas tradicionales y sus autoridades elegidas en asambleas comunitarias, para preservar su territorio y defenderse del crimen organizado, que ha talado de manera ilegal 20 mil de las 27 mil hectáreas de su bosque, además de haber asesinado a varios comuneros.
Para la preaudiencia del tribunal se presentarán más de una docena de casos documentados que demuestran el alto grado de agresión socio-ambiental en Michoacán, como el proyecto de vialidad Altozano-Camelinas, que cruza el área natural protegida de la Loma de Santa María, zona de recarga de 40% del agua para la ciudad de Morelia; el de los habitantes de Lázaro Cárdenas que se pronuncian en contra de un gran proyecto de infraestructura asociado a un puerto marítimo que conecta rutas comerciales de Estados Unidos a China; el de las comunidades purépechas de Patamban y Tengüencho, que defienden sus bosques contra las plantaciones agroindustriales de aguacate; el de la comunidad de Zacapu, que resguarda sus humedales y laguna ubicados dentro de un área natural protegida amenazada por un proyecto turístico; la comunidad purépecha Cheranatzicurin, Paracho, que presenta despojo de tierras y devastación del bosque por talamontes coludidos con el crimen organizado; la comunidad de Agangueo, que lucha en contra del saqueo por la Minera México y en defensa del bosque que alberga cada año a la mariposa Monarca; las comunidades de La Minzita, Cerros del Sur y Hacienda del Quinceo, que denuncian el despojo de espacios públicos y los abusos de la urbanización salvaje, entre otros casos, evidencias y pruebas que se presentarán. Toda esta red de agraviados locales ha respondido a la Octava Asamblea Nacional de Afectados Ambientales, organizándose formalmente por primera vez como una instancia unitaria de resistencia denominada Coordinadora Michoacana de Afectados Ambientales.
La trascendencia de este encuentro radica en visibilizar la emergencia de una resistencia popular que se levanta en contra de la corrupción gubernamental estatal y federal, que permite y promueve la privatización de servicios públicos, como el manejo del agua, la basura, la distribución y producción de energía y alimentos; en contra de las agresiones de las bandas criminales, protegidas por autoridades civiles y militares; en contra de las poderosas empresas mineras, agroindustriales, papeleras, inmobiliarias, turísticas, etcétera, así como en contra de proyectos inmobiliarios, centros comerciales, basureros, confinamiento de residuos tóxicos, granjas industriales de cerdos, gasolineras, todo lo cual tiene impactos profundos en el hábitat, en la salud y reproducción de los pueblos como tales, y en la posibilidad futura de la vida misma de la especie humana.
Por su parte, la octava Asamblea Nacional de Afectados Ambientales constituye el más importante acontecimiento anual de este espacio de resistencia autónomo, en el que convergen la mayor cantidad de agraviados y activistas de diversas partes del país, para intercambiar experiencias sobre la amplia variedad de conflictos ambientales que tienen lugar en todo el territorio nacional, tanto en el ámbito urbano como en el rural. Coinciden también otras luchas que se hermanan con las ambientales, como las indígenas, campesinas, obreras, sindicales, por los derechos humanos, contra la guerra social que se encubre en la del narcotráfico. La importancia de esta octava asamblea es múltiple, ya que ocurre en un momento de gran efervescencia social en Michoacán y en el país, articulando procesos de resistencia de afectados con el movimiento magisterial de la Sección 18 y el movimiento estudiantil local, duramente reprimido por los gobiernos estatal y federal. Se espera, igualmente, la presencia de diversos movimientos que intentan unificar las luchas, como el Movimiento de Liberación Nacional, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, la Vía Campesina, el movimiento urbano popular y los jóvenes integrantes del Movimiento #YoSoy132, entre otros.
La octava asamblea ha procedido adicionalmente a organizar una decena de preaudiencias en campos específicos, como la destrucción de bosques, aguas, mares, ríos, tierras de cultivo, maíz, salud humana, vivienda urbana, etcétera, encaminadas a conformar un expediente pormenorizado de la devastación ambiental nacional, que permita fincar responsabilidades a actores precisos: empresas privadas y públicas, funcionarios públicos corruptos de todos los niveles de gobierno, científicos mercenarios y corporaciones, y con toda esa información poder organizar una demanda colectiva en contra del Estado mexicano que –por omisión y comisión– está ocasionando la destrucción extendida, deliberada, sistemática y dolosa del medio ambiente nacional.

viernes, 29 de junio de 2012


Atenco TERROR institucional

Nancy Flores / David Cilia, fotos
San Salvador Atenco, Estado de México. Miradas de reprobación y escrutinio son vehementes en los rostros de los pobladores. Después del operativo de represión, promovido el 4 de mayo de 2006 por los gobiernos federal y estatal, cada forastero es escrutado y recibido con desconfianza. Y es que desde esa fecha el pueblo de Atenco está dividido en dos: delatores (priístas) y delatados (integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y adherentes a la Sexta Declaración de la Selva Lacandona).



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Los últimos —víctimas de la ultraderecha que impone el supuesto “orden” contraviniendo la Constitución— dicen que los traidores han sido identificados, que son militantes del Partido Revolucionario Institucional pagados por el “mal gobierno” de Enrique Peña Nieto y usados como delatores en el acto de represión patrocinado con recursos públicos. Tras recabar varios testimonios, los miembros del FPDT han confirmado la identidad de al menos tres hombres y una mujer de extracción priísta quienes, cubiertos con pasamontañas, se encargaron de señalar las casas de familiares y amigos del líder Ignacio del Valle. Durante el operativo, medio centenar de viviendas fueron allanadas por elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP) y de la Policía Estatal, a pesar de que en ningún caso se contaba con orden judicial como lo manda la Ley.
Además de la zozobra desatada por la presencia de “espías” del gobierno que vigilan cada movimiento de los integrantes del Frente de Pueblos, y de las amenazas de más allanamientos que sueltan los priístas, las miradas contienen dolor, indignación, miedo, pero sobre todo rabia; esa rabia por haber sido violentados como pueblo, como individuos, como gente humilde, como gente campesina.
La tranquilidad de Atenco ha sido robada por ese supuesto “Estado de Derecho” que pretende justificar el uso excesivo de la fuerza pública. Y aunque la plaza, las calles y los callejones, que parecen un extraño laberinto, han sido finamente lavados y el asfalto no muestra más la sangre que la bota de la represión arrancó a los detenidos tras brutales golpizas, la gente no olvida.
Ventanas destrozadas, puertas rotas, muebles tronchados y ropa esparcida por doquier en unos 50 hogares, entre ellos el de Ignacio del Valle, y en las oficinas ejidales, de donde además fueron robados 140 mil pesos, una computadora y varios documentos internos, según acusan el comisariado ejidal Santiago Medina Islas y el tesorero Julio Flores Yáñez, demuestran lo que la administración de Vicente Fox le hizo a este pueblo dos meses antes de la elección presidencial.
“El gobierno sólo trajo intranquilidad a Atenco”, dicen algunos vecinos que no se identifican porque tienen miedo a las represalias. Pero la embestida, señalan, no viene únicamente del aparato gubernamental, sino que se da en complicidad con los medios de comunicación.
“TV Azteca y Televisa dicen que somos delincuentes. Nos acusan de violentos como de por sí lo hacen con los pobres de este país. Pero si alguien ha traído la violencia son Fox y Peña Nieto. En dónde están los hijos de Marta Sahagún, en dónde está Arturo Montiel o el góber precioso (Mario Marín). Por qué no le aplican el 'Estado de Derecho' a los verdaderos delincuentes”, se preguntan.
Y aunque no se trata de narcotraficantes ni de secuestradores, para el gobierno esta gente y los 189 presos políticos de Atenco y de La Otra Campaña, como los ha reconocido el subcomandante insurgente Marcos —de los cuales 17 ya fueron absueltos—, son acusados de haber cometido el delito de delincuencia organizada.
Así lo demuestra el cargo que se les pretendió fincar en la averiguación previa 96/06 y la posterior apelación contra el fallo de absolución dictado el pasado 10 de mayo por el juez segundo penal de Toluca, Jaime Maldonado, cuya oficina está decorada con una foto del gobernador Enrique Peña, quizá porque poco le importa la independencia de poderes.
Un integrante del FPDT explica: “para Fox somos peligrosos porque no estamos de acuerdo con su gobierno; pero cómo vamos a estar de acuerdo si lo único que hace es engañar para vender lo que no es suyo. Él está enojado con nosotros porque no pudo construir su aeropuerto y por eso nos reprime y manda a la cárcel a Nacho (del Valle) y a otros 'compas'. Ahora dice que ya nos desarticuló. No es así, nosotros estamos en pie de lucha”. El operativo Un día después del desalojo de por lo menos ocho floricultores del mercado Belisario Domínguez, ubicado en Texcoco, que provocó un enfrentamiento entre miembros del FPDT y elementos de las policías federal, estatal y municipal —y cuyo saldo fue de un menor de edad muerto, 94 detenidos, entre ellos Ignacio del Valle, y nueve agentes retenidos—, Atenco fue tomado violentamente.
Con el pretexto de rescatar a los elementos de la policía que permanecían bajo la custodia de los pobladores, y a pesar de las negociaciones que se mantenían con el gobierno estatal para liberarlos, al despuntar el 4 de mayo se inició el operativo de represión instrumentado por el Estado mexicano.
La vigilancia flaqueaba: en las barricadas formadas por unas treinta personas —con excepción de la principal que apenas superaba las 250 y estaba ubicada en la calle de Los Fresnos —, la mayoría de los integrantes del FPDT, adherentes a la Sexta Declaración, observadores de derechos humanos y estudiantes, dormían cobijados por el calor de las llantas incendiadas.
Algunos activistas se habían retirado: creían que al amanecer el peligro de una intervención policíaca estaba superado. No fue así. Aunque una falsa alarma a las tres de la madrugada los volvió escépticos, a las seis las botas de unos 3 mil 500 elementos de la Policía Estatal y de unos 2 mil de la PFP pisotearon Atenco.
Las campanas de la iglesia, que se encuentra justo frente a la plaza principal, la presidencia municipal y las oficinas del comisariado ejidal, repicaron en señal de alerta. La resistencia adormilada preparó la defensa con algunas bombas molotov, cohetones, palos y piedras. Cinco helicópteros, tanto de la federal como de la estatal, empezaron a sobrevolar la zona y a lanzar algún tipo de gas, cuentan testigos. En uno de éstos viajaba un delator.
La represión llegaba a San Salvador Atenco con una sola orden: “golpear todo lo que se mueva”. Las tropas de la fuerza pública avanzaban tras los disparos de varios dispositivos de gas lacrimógeno e incluso de las armas de fuego que portaban los estatales, de acuerdo con tres testimonios obtenidos por el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez.
Una joven, que se salvó de una inhumana golpiza y del abuso sexual que sufrieron en su mayoría las mujeres detenidas, dice: “detrás de la gran nube de gas se veían demasiados policías. Vimos nuestros palos y omprendimos que nada podíamos hacer. El gas nos hacía vomitar, no veíamos ni respirábamos bien. Corrimos. Los vecinos salían para darnos trapos empapados de agua o vinagre. Luego alguien nos refugió en su casa y ahí permanecimos por 12 horas”. Afuera, y sin importar siquiera que las cámaras fotográficas y de televisión registraban la saña con la que eran sometidas las ya de por sí disminuidas víctimas, policías federales y estatales reprimían a su antojo a los detenidos en supuesta flagrancia.
Con la anuencia del presidente Vicente Fox y su aparato gubernamental la fuerza pública golpeó y pateó a los hombres y a las mujeres hasta el hartazgo, hasta que la sangre les empapaba el rostro, los brazos, la ropa. Los detenidos sin orden de aprehensión, varios de ellos en calidad de bultos, como el trabajador de Telmex, Jorge Salinas Jardón, fueron arrastrados hasta los camiones que los trasladarían al penal de Santiaguito.
Apilados en los pasillos de las camionetas, los aprehendidos eran torturados y las mujeres abusadas sexualmente, como si se tratara del “botín de guerra” prometido a las tropas desde las oficinas de los altos funcionarios. Detrás de la rejilla de prácticas del juzgado segundo de lo penal, después de denunciar las vejaciones de las que fueron objeto, un joven estudiante increpa a los reporteros con un resumen de la brutalidad: “¿Han olido la sangre humana? O nada más se divierten con el sufrimiento de los demás. ¿Han viajado en un 'pinche' camión de granaderos en donde la sangre chorrea por todos lados, en donde huele a sangre humana, a rastro?, ¿han sentido eso?” En el pueblo, los delatores señalaban las casas que fueron cateadas: sus moradores, incluso los niños y los ancianos, eran golpeados.
Del allanamiento a las viviendas se obtuvo el mayor número de personas detenidas. En los techos, los tinacos eran revisados sin excepción. Hasta las tumbas del panteón del pueblo, ubicado en la calle Miguel Hidalgo, fueron registradas. La priísta y sindico procuradora del municipio de Atenco, Rosalinda Martínez Morales, admite que el operativo fue excesivo y que la violencia y la represión instrumentada por el Estado es injustificable, pues, acepta, antes del 4 de mayo el pueblo estaba en paz. “Los del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra no podían ser considerados como un peligro para nadie”, afirma.
El operativo de represión instrumentado por el director de Seguridad Pública del Estado de México, Wilfrido Robledo, apoyado por el ex director del Cisen y actual secretario de Seguridad Pública Federal, Eduardo Medina Mora, concluyó a la seis de la tarde del 4 de mayo con 189 presos políticos, cinco extranjeros expulsados ilegalmente del país, un adolescente muerto y un estudiante en estado de coma. Hasta ahora nadie sabe el número exacto de desaparecidos.
“Esto que nos hicieron no se va a quedar impune. Sabemos quiénes son. Nada más que se tranquilice esto habrá justicia”, dice un anciano atenquense. “El pueblo está indignado con el gobierno y con los traidores.
La gente tiene miedo porque los priístas andan amenazando, pero poco a poco nos estamos reactivando y nos vamos a defender porque estamos en contra de estas injusticias”, advierte un integrante del FPDT que mantiene guardia en la mesa de información de la casa ejidal

Información tomada de la revista contralínea. http://contralinea.info/archivo-revista/

miércoles, 6 de junio de 2012

Movimiento por la paz con justicia y dignidad

Javier Sicilia habla a los candidatos y la candidata a la presidencia de la república

Palabras Javier Sicilia / MPJD
México D.F., 28 de mayo de 2012.- Buenas días señora Josefina Vázquez Mota; señor Enrique Peña Nieto; señor Andrés Manuel López Obrador; señor Gabriel Quadri; buenos días hermanos y hermanas del MPJD; buenos días a la ciudadanía herida de esta nación. Muchas gracias por asistir a nuestra convocatoria.
Antes de empezar a dar nuestra palabra, quiero, como siempre, leer unos versos; esta vez de Piedra de sol de Octavio Paz: “[…] el mundo nace cuando dos se besan,/ […] y las leyes comidas de ratones,/ las rejas de los bancos y las cárceles,/ las rejas de papel, las alambradas,/ los timbres y las púas y los pinchos,/ el sermón monocorde de las armas, […]/ el burro pedagogo, el cocodrilo/ metido a redentor, padre de pueblos,/ el Jefe, el tiburón, el arquitecto/ del porvenir, el cerdo uniformado,/ el hijo predilecto de la Iglesia/ que se lava la negra dentadura/ con el agua bendita y toma clases/ de inglés y democracia, las paredes/ invisibles, las máscaras podridas/ que dividen al hombre de los hombres,/ al hombre de sí mismo, se derrumban/ por un instante inmenso y vislumbramos/ nuestra unidad perdida, el desamparo/ que es ser hombres, la gloria que es ser hombres/ y compartir el pan, el sol, la muerte,/ el olvidado asombro de estar vivos/ […]”
Porque esta nación no termina de encontrar su camino, porque, como dicen esos versos de Paz, ha estado tomada en muchos sectores por la hipocresía, el cinismo y la delincuencia que tienen herido el corazón de la nación y hecho pedazos el cuerpo de la patria, y por nuestros muertos y desaparecidos, que son el rostro sin fin de esa herida, pedimos a todos un minuto de silencio.
Hace más de un año, permítanme recordarlo, porque el Alzheimer social y político en México es muy grave, el 28 de marzo de 2011, araíz del asesinato de mi hijo Juan Francisco y de sus amigos, Luis, Julio, Gabo, y otras tres personas más, pronunciamos por vez primera “Estamos hasta la madre”, que se convirtió en la voz de miles. La exclamación fue acompañada días después por una carta con ese mismo título publicada en Proceso. Parte de ella y de ese “Estamos hasta la madre” estaba y continúa estando dirigido a ustedes, los políticos; la otra parte, a los criminales. Días después, el 8 de mayo, después de la larga marcha de cuatro días de Cuernavaca al DF, enla Plaza dela Constitución, leímos un discurso y propusimos seis puntos como el mínimo suelo que necesita la nación para salvar su dignidad, y sobre los que hablaremos en la segunda parte de este encuentro. En ese discurso, dirigido a todos, les dijimos particularmente a ustedes “que no (aceptaríamos) más una elección si antes los partidos políticos no (limpiaban) sus filas de esos que, enmascarados en la legalidad, están coludidos con el crimen y tienen al Estado cooptado e impotente”. Les pedimos también a los Legisladores una Reforma Política amplia que incluyera revocación de mandato, referéndum, consulta e iniciativa ciudadana, plebiscito, voto blanco, candidaturas ciudadanas, reelección y limitación del fuero, e hiciera así más participativa la vida democrática. Les pedimos también una agenda de unidad que nos permitiera salvar la emergencia nacional en la que esta guerra contra las drogas y la corrupción de las instituciones nos ha sumido, y les advertimos que de empeñarse en su ceguera, las instituciones no sólo “se (convertirían) en lo que ya empiezan a ser, instituciones vacías de sentido y de dignidad, sino que las elecciones de 2012 (serían) las de la ignominia, una ignominia que (haría) más profundas las fosas en donde, como en Tamaulipas, están enterrando la vida del país”.
No hicieron ninguna limpieza honorable de sus filas, nos negaron la Reforma Políticay nos han llevado a estas elecciones ignominiosas que han hecho salir a miles de jóvenes a las calles para encontrar el camino que ustedes cancelaron. Lejos de construir la unidad nacional sobre la que tanto hemos insistido, sus campañas electorales parecen la continuación de la violencia que nos azota por otros medios, una violencia que ahonda la fractura de la patria y de las fosas en donde en nombre del poder, de la soberbia y del éxito que debe obtenerse por cualquier medio y a cualquier precio, se empeñan en enterrar la vida de la nación. Aquí, señora Vázquez Mota, señor Peña Nieto, señor López Obrador, señor Quadri, hay víctimas que hablarán después de mí y que son el engendro del pudrimiento de las instituciones, de la represión de sus partidos y del crimen organizado. Mientras estas víctimas no han recibido un gramo de justicia ni de reparación a sus daños, mientras la marcha macabra de los señores de la muerte avanza en los territorios gobernados por sus partidos y los desaparecidos, los desmembrados, los descabezados, los levantados, aumentan; mientras la ciudadanía vive en la indefensión, ustedes y sus partidos gastan en campañas millonarias –la suya, señor Peña Nieto, es verdaderamente desvergonzada— y en demagogia.
Ni para ustedes ni para sus partidos existen los casi 60 mil muertos, los más de 20 mil desaparecidos, los cientos de miles de deplazados, heridos y perseguidos, y las deceneas de miles de viudas y huérfanos que esta imbécil guerra contra las drogas nos está costando y cuyo número aumenta día con día; no existe nuestro sufrimiento; no existen tampoco las desapariciones y los asesinatos de los migrantes que llegan o pasan por nuestro territorio –no hubo una sola mención a ellos por parte suya en el debate en donde entre las mutuas acusaciones, la ocurrencia de la demagogia, y la edecán, ustedes sólo dieron el espectáculo de la frivolidad y de la lejanía que tienen frente a la nación–. Para ustedes, por lo tanto, no existen la emergencia nacional ni las miles de zonas tomadas por el crimen organizado ni los funcionarios de sus partidos coludidos con él ni el problema de la guerra. Se han contentado simplemente con hablar de la inseguridad, de acusar de corruptos a los otros partidos, y de proponernos enfrentar la inseguridad con más violencia. No han expresado ningún camino humano y a corto plazo para construir esa paz que tanto anhelamos y sin la cual las elecciones son sólo una simulación; no han siquiera pedido perdón a los ciudadanos y a los migrantes centroamericanos por estas desgracias de las que sus partidos y sus gobiernos son tan responsables como el gobierno federal. Ustedes, como el Presidente Calderón y los demás candidatos y partidos, parecen tener sólo imaginación para la violencia, la disputa, o las vaguedades retóricas. Continúan negándose a escuchar el corazón herido de la patria.
Esta herida que, a pesar de todo lo que hacen y dicen para no verla ni asumirla en su profunda gravedad, no pueden borrar, los increpa hoy y les pregunta. ¿Díganos, cómo con mayorías relativas –porque de ganar sólo ganarán con ellas– piensan gobernar y sanar en su emergencia nacional a está patria desmembrada? ¿Son ustedes tan soberbios para creer que en estas condiciones de emergencia nacional se puede gobernar sin la unidad de la nación? ¿Cómo harán, si ganan, para crearla y no convertirse en un nuevo administrador de la desgracia del país? ¿Cuál es su propuesta de paz, más allá de programas reconstructivos a largo plazo? ¿Qué propone para crear los instrumentos que permitan ala Ley Generalde Víctimas, recientemente aprobada, sin que el presidente se haya dignado a promulgarla, hacerse una realidad para ellas? ¿Cuál es su posición frente al asunto de las drogas y su propuesta para dejarlas de ver como un problema de seguridad nacional y enfrentarlas como un asunto de salud pública que ponga fin a esta guerra perdida. ¿Cómo, por lo tanto, van a generar una política que no nos subordine a la estrategia de seguridad nacional de los Estados Unidos? ¿Qué tiene que decirle a las víctimas de su partido que hoy están aquí frente a usted?
Para muchos, usted, señora Vázquez Mota, significa la continuidad de una política que nos ha sumido en el horror, la miseria y el despojo, el señalamiento duro a las corrupciones de los otros partidos, pero la incapacidad autocrìtica para ver las del suyo y la protección o la simulación frente a delincuentes o malos funcionarios de su partido que ocupan y ocuparon cargos políticos, incluso de Estado. Usted representa a un partido que nos debe la transición y que se ha corrompido a grados ignominiosos con el poder. Usted representa un partido que después de doce años deja como una de sus herencias un inmenso camposanto como patria.
Para muchos, señor Peña Nieto, usted representa el regreso al pasado, es decir, el regreso al origen de la corrupción de las instituciones que hoy se desborda por todas partes y cuyo rostro no es sólo la violencia, el dolor, la corrupción, la impunidad y la guerra, sino la imposición de la presidencia imperial, el uso patrimonialista de la nación y la represión –Atenco, la respuesta descalificadora a los muchachos dela Ibero, la manipulación mediática frente a sus legitimas protestas, son sus señales más claras. Representa también el voto corrompido, el voto comprado, el voto no ciudadano, el de la miseria moral y el de la arrogancia y los intereses de los monopolios de la comunicación. Hoy está aquí presente el escritor Germás Dehesa que hasta el último día de su vida, como un signo de ética ciudadana, contó las noches que se acumulaban cargadas de los agravios de la fraudulenta gestión del exgobernador Arturo Montiel.
Para muchos, usted, señor López Obrador, significa la intolerancia, la sordera, la confrontación –en contra de lo que pregona su República Amorosa– con aquellos que no se le parecen o no comparten sus opiniones; significa el resentimiento político, la revancha, sin matices, contra lo que fueron las elecciones del 2006, el mesianismo y la incapacidad autocrítica para señalar y castigar las corrupciones de muchos miembros de su partido que incluso, contra la mejor tradición de la izquierda mexicana, no han dejado de golpear a las comunidades indígenas de Chiapas y de Michoacán o a los estudiantes Guerrero. Significa también la red de componendas locales con dirigentes que años atrás reprimieron a quienes buscaban un camino democrático, el señor Bartlet es sólo la punta del iceberg.
Para muchos usted, señor Quadri, significa la usurpación de las candidaturas ciudadanas –que nos negaron junto conla Reforma Política—, la arrogancia y una doble moral que pretende reivindicar el liberalismo y criticar los monopolios mientras usted sostiene su campaña apoyado en la mafia de una cacique que representa lo peor de nuestra clase polìtica, y en el poder de un sindicato corrupto que tiene secuestrada la educación de la patria, que usa a nuestros niños para el chantaje de más canonjías y posee una fortuna que, fruto de la corrupción nos ofende y nos indigna a todos.
La democracia en su sentido real, no es el voto ni las elecciones libres –aunque la apoyen–, no es una cuestión de administraciones institucionales ni de arreglos entre ellas y sus consejos especializados llamados partidos, cámaras y secretarías, mucho menos el libre mercado, es la dignidad de una nación que sólo aparece allí donde se generan relaciones de confianza y de apoyo mutuo más allá de cualquier interés de poder o de dinero ¿Cómo piensan darle vida a una democracia que sus partidos, la inoperancia del Estado que niega y reprime todo lo que no puede controlar, la criminalidad y los diversos y oscuros intereses del poder y del dinero nos han arrancado?
Estamos, como lo dijimos hace más de un año, no sólo en la misma “encrucijada sin salidas fáciles”, sino ante un proceso electoral atrapado en un callejón sin salidas. Ustedes saben que gane quien gane estas elecciones tendrán que enfrentarse a un suelo y a un tejido social destrozados que ustedes con sus divisiones, sus interes, sus pleitos, no están ayudando a rehacer sino a desgarrar más. Hoy parece que las urnas electorales no alcanzarán para responder a los sueños rotos de la patria. Nosotros, sin embargo, no hemos dejado de insistir en una unidad nacional. No hemos venido aquí, por lo tanto, a apoyar a ninguno de ustedes, sino a emplazarlos, como ya lo hicimos aquel 8 de mayo de2011, aconstruir, permítanme reiterarlo una vez más, “una unidad nacional que le permita a la nación rehacer su suelo. ¿Cómo pueden ustedes, más allá de sus intereses de partido, cooperar con esa voz que nosotros hemos escuchado en nuestro peregrinar por toda la república, esa voz que los universitarios hacen oir en las calles y en las redes sociales, y que hemos escuchado en español, náhuatl, purépecha, tseltal o wirrárika, lo mismo en Acteal que en Ciudad Juárez, esa voz que exige democracia, paz, justicia y dignidad?
Además opinamos que hay que respetar los Acuerdos de San Andrés y el etcétera, etcétera, que nos deben a los mexicanos.
México D.F., 28 de mayo de 2012

domingo, 11 de marzo de 2012

Por una nueva organización de los trabajadores

Tomado del periodico La Jornada del día Domingo 11 de Marzo de 2012.
 
Pablo González Casanova
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Asistentes al foro realizado en la Universidad Obrera de México, durante el discurso de Pablo González CasanovaFoto Francisco Olvera
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El líder del SME, Martín Esparza, con el ex rector Pablo González Casanova Foto Francisco Olvera
A la actual crisis financiera se suma la ecológica
En México dicha situación comienza desde los años 60
Se fomenta el individualismo en la sociedad y la ruptura de lazos
La unión del sector laboral y el pueblo, camino a la solución
La situación del mundo y del país muestran claras tendencias a agravarse. A la crisis financiera y económica que pesa sobre la inmensa mayoría de la humanidad, se añade la grave crisis ecológica que amenaza a toda la humanidad. Se trata de algo más que la crisis del modelo neoliberal que el capitalismo corporativo impuso tras el golpe de Pinochet en Chile y con los gobiernos conservadores de la Thatcher en Inglaterra y de Reagan en Estados Unidos.
En México la crisis se ha venido preparando desde que las políticas monetaristas empezaron a aplicarse en los años sesenta dando lugar al movimiento de los médicos, y al de los estudiantes y del pueblo en 1968, así como a la insurgencia obrera de los setentas y a numerosos intentos nacionales de resistencia a los procesos de restauración del capitalismo asociado y dependiente.
La crisis se fue preparando con medidas cada vez más contrarias al interés nacional, a los trabajadores, a los campesinos y los ciudadanos. Desde los años setenta hasta hoy, el endeudamiento externo creció sin precedente. En los años ochenta se volvieron a privatizar los bancos que eran fuente de altas tasas de utilidades y de inmensos ingresos para la nación. Desde entonces se empezaron a aplicar cada vez más las medidas neoliberales y neoconservadoras que favorecen al capital corporativo en detrimento de la nación. En forma sucesiva se reformó la Constitución para acelerar el proceso de contra-rreforma agraria. Se acentuó el desmantelamiento del Instituto Mexicano del Petróleo y, cada vez más, el de la industria petrolera y sus derivados. Se descuidó y obstruyó la construcción de las infraestructuras para el desarrollo agrícola y la soberanía alimentaria. Se orientó el uso de los préstamos extranjeros a la compra de alimentos chatarra y de armas y municiones, resolviendo los problemas de sobreproducción de los prestamistas y estableciendo con ellos convenios en que quedaba a su arbitrio la fijación de las tasas de interés. Esas medidas y numerosos tratados o acuerdos como el ALCA, el Plan Mérida y sus derivados constituyeron a la vez fuertes sangrías para el pueblo mexicano y sus trabajadores y dieron pie a varios procesos simultáneos: la depauperación de la inmensa mayoría de la población mexicana; la baja de salarios directos e indirectos; el peso principal de la carga fiscal en la población de menores ingresos, la reorientación del presupuesto de egresos en favor del capital corporativo y sus asociados; la disminución y deterioro de los empleos y de los servicios médicos, educativos, de salud pública, y de construcción de viviendas.
La privatización creciente de las actividades públicas –como el petróleo, la electricidad, y ahora las prisiones– y su metamorfosis en actividades lucrativas se combinó con el uso creciente de la represión y la corrupción, y con el control de la población, de los trabajadores, de los desempleados, de los jóvenes y sus movimientos legales y pacíficos con agentes abiertos y encubiertos, así como con militares a los que se empezó a entrenar para la lucha contra sus pueblos y a los que se dieron órdenes de preparar a paramilitares, medidas ambas, como las anteriores, en abierta violación al régimen legal y a la Constitución de la República.
En el conjunto del país se llevó a cabo un desmantelamiento sistemático de los derechos constitucionales y de las garantías individuales y sociales que el pueblo mexicano había logrado en una Revolución como la de l910-17 en la que perdieron la vida más de un millón de habitantes.
A la depredación y empobrecimiento creciente del país en beneficio de las corporaciones y sus asociados se añadieron crecientes ofensivas en el orden político, cultural y educativo que acentuaron las diferencias entre el país real y el país formal; que criminalizaron las críticas y oposiciones de los de abajo, que acentuaron la política de discriminación y depredación de las comunidades indígenas y no indígenas de campesinos pobres; que asesinaron a miles de trabajadores expulsados de sus tierras y de sus trabajos, y que buscaban desde México, y desde los hermanos países de Centroamérica cruzar el inmenso muro que separa a las poblaciones de México y Estados Unidos para ver si allá encontraban el trabajo que en sus países habían perdido con sus tierras y sus casas.
La ofensiva también se dio contra los sindicatos industriales, agrícolas y de servicios, y afectó en especial a la gente más joven que no tiene ni casa, ni empleo, ni universidad, ni escuela, y con un múltiple daño silencioso a la población de ancianos que perdieron sus seguros de vida y ahorros para el retiro, pues de sus montos se encargaron las empresas financieras especulativas. En cuanto a la población de edad intermedia, a la violación de facto de sus derechos laborales y sociales, se añadió una presión constante y creciente por acabar con esos derechos tanto en la Constitución de la República como en las leyes que derivan de ella. Una campaña realizada a través de todos los medios no sólo tendió a culpabilizar de los daños a las víctimas –fueran obreros, campesinos, indígenas, mujeres, jóvenes y viejos– sino que los sometió a imágenes televisivas e impresas que tienen como objetivo el que pierdan la autoestima, el que olviden los hechos heroicos de los pueblos originarios y de los movimientos de Independencia, de Reforma y Revolución. Para eso no sólo se reformaron los libros de texto –borrando nuestra historia prehispánica y a los héroes del pueblo– sino que se privilegiaron en diarios, semanarios, y programas de radio y televisión las fiestas, amabilidades, bondades y sonrisas de los mexicanos bien, mientras el pueblo aparecía y desaparecía como un conjunto de débiles mentales y de payasos, cuyas necedades y torpezas mueven a risa y justifican ante ellos mismos su lamentable condición y fundada pérdida de la autoestima.
La múltiple ofensiva se enriqueció con una guerra virtual contra el narcotráfico que ya cobró más de 50 mil víctimas, mientras siguen fluyendo los miles de millones de dólares sin que se descubra a sus beneficiarios. Entre los objetivos de la narcoguerra destaca la pérdida de sentido de la lucha y de la vida entre numerosos jóvenes que son reclutados por las buenas o por las malas y que se embarcan en batallas por pequeños territorios que defienden o hacen suyo, como en los videojuegos de Los pollos y muchos más en que se dan divertidas y crueles luchas por diminutos espacios, juegos que se combinan con la creciente intervención de las agencias estadunidenses en el auxilio al gobierno mexicano y en las funciones que este debería desempeñar, controlando el blanqueo de dinero y el contrabando de armas, tareas que sin duda le sería más fácil controlar si no hubiera entregado, con los servicios de inteligencia, los bancos y las aduanas.
Termino este recuento incompleto señalando cómo se ha fomentado la ruptura de los lazos familiares y sociales, el individualismo en la sociedad y el oportunismo en la política, así como alentando el ideal neoconservador de el fin de las ideologías, que vacía de contenido a la democracia electoral y política de sus objetivos centrales de propuesta y lucha por políticas sociales y nacionales alternativas, reduciéndola a una triste contienda entre los miembros de cada partido por ser nombrados a puestos de elección popular por partidos que obedecen a la lógica de lo menos malo en condiciones cada vez peores para el pueblo, los trabajadores de la nación. Todas estas circunstancias y otras más le plantean a los trabajadores, a los pueblos y a los ciudadanos de México y el mundo la necesidad de reformular sus luchas y de restructurar sus organizaciones para fortalecer su capacidad defensiva y para aumentar su innegable capacidad de construir otro mundo posible menos autodestructivo, menos opresivo e injusto, tarea para la que existen todas las posibilidades humanas y naturales de triunfar, y para la que la humanidad cuenta con todos los conocimientos, experiencias y técnicas que permiten lograr ese objetivo.
Al plantear los caminos de solución, en las condiciones que vivimos, necesitamos respetar a los integrantes de la central en su pleno derecho a participar o no en la política de los partidos como sindicatos o como ciudadanos. Al mismo tiempo la central buscará como objetivo la unidad de los trabajadores, los pueblos y los ciudadanos con plena independencia de los partidos. La unidad en la diversidad de los trabajadores se propondrá impedir que las luchas de partidos o las diferencias religiosas, culturales, regionales o raciales dividan a los trabajadores de la central y disminuyan su capacidad de constituir un centro de organización de la clase obrera unida con los movimientos sociales en lucha contra el capitalismo corporativo y contra el modelo neoliberal, y por una civilización en que la barbarie del capitalismo sea sustituida por una democracia de veras en la que pueblos y trabajadores, como comunidades y como ciudadanos, participen en la toma de decisiones para la creación de otro mundo posible y necesario en que el vivir bien de unos no dependa del vivir mal de otros y en que con la justicia social se alcance la libertad.
Lograr esos objetivos implica luchar por otros más cuya práctica es inminente y entre los que se encuentran: 1. Rescatar las grandes luchas de los pueblos y los trabajadores mexicanos y en especial de los discriminados, excluidos y desregulados de nuestro país y del mundo, 2. Defender las garantías y derechos constitucionales y tomar la Constitución de 1917 sin las reformas neoliberales como base para las nuevas luchas revolucionarias, como siempre ha ocurrido en la historia de México. 3. Exigir e imponer en las demandas inmediatas la aplicación de la Ley Federal del Trabajo y del contrato colectivo y otras normas más que el actual gobierno está sistemáticamente violando o pretende que desaparezcan. 3. Luchar por la soberanía nacional y por la organización de los mexicanos para que ejerzan el supremo derecho que reside en ellos, cada vez más atacado por los entreguistas de viejo y nuevo cuño 4. Luchar contra la criminalización de los movimientos sociales. 5. Luchar contra la cultura del individualismo y el oportunismo que se está fomentando por todos los medios y con los métodos de evaluación y exclusión que tienden a hacer pensar a la víctima que es la culpable. 6. Luchar por los derechos de los pueblos indios y para que se cumplan los acuerdos de San Andrés. 7. Promover la organización y articulación de los trabajadores industriales, agrícolas y de servicios. 8. Promover la unión de los trabajadores organizados y no organizados, la unión de los trabajadores manuales e intelectuales, la unión de los trabajadores de los sectores medios y los excluidos, los desregulados o los discriminados. 9. Promover con ellos grupos y colectivos de enlace que construyan el tejido social de las comunicaciones, las informaciones, los intercambios y las organizaciones presenciales y a distancia, 10. Incrementar los periódicos y publicaciones no sólo impresos sino los que utilizan los medios electrónicos como medios de organización-información-acción, diálogo-debate-consenso- 11. Promover campañas de alfabetización política para la toma de decisiones y para la práctica de las técnicas de aprender a aprender y a leer, y cambiar no sólo los textos sino el mundo, y a construir y crear textos y mundos alternativos, l2. Promover las universidades y escuelas de la Tierra y en ellas la cultura humanística, científica, artística, y el conocimiento de los oficios y profesiones que necesitan los pueblos y las zonas urbanas marginadas de trabajadores y proletarios, de desregulados y excluidos, de discriminados y despojados. 13. A este respecto, organizar los sistemas de defensa de los trabajadores, los pueblos y los ciudadanos frente a los depredadores y las mafias que están empeñados en someterlos, corromperlos, enviciarlos, esclavizarlos y en acabar con el sindicalismo democrático, con las uniones de los campesinos, con sus medios y fuentes de trabajo y de vida. 14. Promover la articulación de los trabajadores con los estudiantes y los jóvenes en acciones conjuntas que incrementen la cultura solidaria y cooperativa y la capacidad de comunicación y acción. 15. Buscar en los programas de los sindicatos y movimientos más avanzados de México, América Latina y el mundo los puntos de coincidencia para plantear la lucha y la articulación de los colectivos desde lo local hasta lo mundial, a sabiendas de que la misma lucha, entre simpatías y diferencias de regiones y sectores es y será una lucha mundial.16. Replantear la lucha ideológica con base en un creciente dominio del pensamiento crítico y alternativo y de la cultura del diálogo y el debate que en nuestros pueblos alcanza niveles cada vez más altos de comprensión y acción. 17. Fortalecer y hacer efectiva la lucha por la moral y la firmeza como verdaderas armas, para el triunfo frente a una política que desde Teodoro Roosevelt se propone dominar al mundo con la zanahoria y el garrote, con la corrupción y con la represión. Hablar de moral y de firmeza, de dignidad y de entereza como armas contra la corrupción que tantas víctimas y estragos hace, y que está asociada a la cultura de la represión y el terror, de la cosificación y deshumanización de los pobres de la tierra y quienes echan su suerte con ellos.
Si el capital corporativo ha colocado la pérdida de los derechos sociales, nacionales, laborales y humanos en el campo de lo no negociable, el frente del pueblo que se organice en torno a la central de trabajadores, que hoy promueven sindicatos que ni se rinden ni se venden, como el heroico Sindicato Mexicano de Electricistas y muchos más, ese frente en gestación alcanzará, con los trabajadores manuales e intelectuales del campo y la ciudad, de la educación, de la salud, de la construcción y los servicios, así como con las comunidades de los pueblos indios y no indios, con la juventud y con los estudiantes, con los periodistas, locutores, actores, escritores, realizadores que luchan en los espacios tradicionales y cibernéticos, ese gran frente de todos y con todos alcanzará la victoria de un socialismo con democracia, y de una democracia con socialismo, con justicia y con libertad.
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sábado, 10 de marzo de 2012

Responde Alejandro Frank a Alfredo Jalife

Apelando a mi derecho a réplica y con cierto desconsuelo, me veo obligado a contestar a las falsas aseveraciones del columnista Alfredo Jalife-Rahme Barrios sobre mi persona y mis opiniones profesionales (ya que no tiene un doctorado, prefiero no utilizar el título de doctor, rememorando el caso del señor Alzati). En realidad, lo hago cerrando los ojos con aprensión, esperando una nueva andanada de calumnias y desoyendo los consejos de mis colegas. El señor Jalife, por enésima ocasión, demuestra su profunda ignorancia científica y su propensión a las teorías conspirativas. Respetuosamente solicito a los lectores leer con atención el artículo al que Jalife se refiere y sacar sus propias conclusiones: jornada.unam.mx/2011/04/16/opinion/018a2pol
El texto de Jalife es en su totalidad alarmista e inexacto. En particular, su aseveración: Se calculan 14 mil niños muertos en EU debido a la derrama radiactiva, rebasa cualquier calificativo, pero lo intentaré: es absurda, ridícula y falaz.
Mi trabajo académico y mis proyectos educativos están a disposición de los lectores, pero me veo en la necesidad de reiterar que no defiendo ni pertenezco a ningún lobby nuclear. Si el señor Jalife tiene alguna evidencia de ello, sería necesario publicarla, como La Jornada ha exigido repetidamente a sus críticos.
El Instituto de Ciencias Nucleares, al que me enorgullezco en dirigir, realiza investigaciones multidisciplinarias y es uno de los más prestigiosos de la UNAM y de nuestro país nucleares.unam.mx. La UNAM es una universidad crítica, diversa y tolerante, que busca contribuir de manera racional y científica a la solución de los problemas de nuestro país. Reitero, como he hecho siempre, que se requiere de una discusión enterada, profunda, inteligente y respetuosa sobre el proyecto energético de nuestro país. El alarmismo, la paranoia conspirativa, la intolerancia, el dogmatismo y, sobre todo, la ignorancia, pueden ser mucho más letales que la radiación para nuestro futuro.
Alejandro Frank

El correo Ilustrado, Periodico la Jornada Viernes 09/03/2012

Fukushima y su "desinformación radiactiva" un año después

Nota Tomada del peridico la Jornada
Miercoles 7 de Marzo de 2012.
Bajo la Lupa
Alfredo Jalife-Rahme
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Un trabajador muestra a la prensa extranjera un monitor con la lectura de la radiación persistente en la planta nuclear de Fukushima, la semana pasadaFoto Ap
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espués de la catástrofe de Fukushima, hace un año (Bajo la Lupa, 10/5/11 y 13/11/11), 52 de las 54 plantas nucleares de Japón han sido cerradas cuando la explosión del reactor destruyó la confianza de la población en la energía nuclear (Spiegel Online, 28/2 y 1/3/12) y obligó al gobierno a cambiar su plan energético por la presión de la opinión pública, pese a los poderosos intereses del lobby nuclear: Tepco, físicos y cabilderos.
El siquiatra Jun Shigemura, a cargo de la rehabilitación terapéutica de Fukushima, revela el intenso grado de trauma sicológico de la población (disminuida a la mitad y con incremento de suicidios) debido a que Tepco redujo los salarios 20 por ciento, cuando los trabajadores perdieron sus casas, sus familiares los abandonaron por temor a la radiación y el público los culpa por trabajar en Tepco.
El premier nipón Yoshihiko Noda, más consciente que su antecesor Naoto Kan –físico y agente de patentes (sic), muy bien lubricado por Tepco–, intenta transformar la política energética, pese a los fuertes intereses del nefario lobby nuclear, al cual le importa un comino el historial de Hiroshima y Nagasaki, ya no se diga el desastre de Chernobyl.
La opinión pública japonesa tiene un término maravilloso para describir al lobby nuclear: Genpatsu Mura, la ciudad atómica: la sacrílega alianza de Tepco, los físicos nucleares y los multimedia(Spiegel Online, 1/3/12). El problema yace en que 30 por ciento la atención a las necesidades energéticas de Japón proviene del ámbito nuclear, por lo que se planeaba construir 14 plantas adicionales en 2030.
Sibel Edmonds, en su blog (Boiling Frogs, 28/2/12), expone que pese a las garantías públicas de que la situación estaba bajo control en Fukushima, ahora se sabe que tres de los reactores de la planta empezaron su desintegración en horas, cuando se realizaron planes para evacuar Tokio. Devela que muchos no saben que los reactores dañados fueron diseñados por General Electric, con una tecnología añeja de 40 años y son sustancialmente similares a los 32 reactores en operación del mundo (sic), incluyendo 23 en EU, lo que exhibe la complicidad criminal de los reguladores (¡supersic!) de los gobiernos que fracasan en reforzar sus propias políticas y regulaciones en estos reactores añejos. Edmonds no dice que la única planta nuclear de México, en Laguna Verde, es también añeja y fue vendida como chatarra por General Electric.
El premier Noda reconoció la culpa compartida del gobierno por haberse cegado en la creencia falsa de la infalibilidad tecnológica de su país: el gobierno, el operador (léase Tepco) y el mundo académico (léase los físicos nucleares) se empinaron (sic) con el mito (sic) de la seguridad (NYT, 3/3/12).
Los estudiantes nipones han sido intoxicados, aun después del desastre, por el Ministerio de Educación, Ciencia y Cultura, que financia a las escuelas para enseñar las supuestas bondades de la energía nuclear. ¡Uf!
La vulnerabilidad energética de Japón se ha incrementado notablemente y por ahora no le queda otra opción que la importación de gas natural licuado de Qatar y Rusia, lo cual comporta también sus limitaciones. Un grave error del gobierno es haber dependido en demasía de la criminal trasnacional Tepco, la cual dictaba la agenda energética.
La fundación Rebuild Japan Initiative conformó un equipo de 30 profesores universitarios, abogados y periodistas (entre ellos el muy prestigiado Yoichi Funabashi, anterior editor del importante periódico Asahi Shimbun) que publicó un demoledor reporte de 400 páginas que tomó seis meses de investigación (NYT, 27/2/12) en el que exhibe que los líderes japoneses no sabían la extensión del daño en la planta y consideraron en secreto la posibilidad de evacuar Tokio (¡supersic!).
La trasnacional Tepco desinformó en forma criminal al gobierno de Naoto Kan y rompió la confianza con el gerente de la planta averiada (con tres explosiones radiactivas a cuestas).
La investigación independiente de la fundación se debió, según Funabashi, a la falla del gobierno en advertir a su población de los peligros y a la amplia desconfianza que generó. ¡Pues sí!: las opiniones publicas no son estúpidas, pese a toda la desinformación radiactiva de sus mendaces gobiernos controlados por trasnacionales criminales, cabilderos y físicos nucleares sin escrúpulos, quienes viven para sostener su empleo en detrimento del bien común y sin importar los daños colaterales.
La serie de explosiones de hidrógeno sacudió la planta y, ante la demoniaca reacción en cadena (sic), se consideró la evacuación de Tokio (más de 13 millones de habitantes), que se encuentra a 270 kilómetros al sur de Fukushima.
De milagro no ocurrió una tragedia generalizada cuando un helicóptero militar confirmó cinco días después que se había evitado el peor escenario. El resto del drama y sus detalles se los dejamos a la próxima película hollywoodense.
Funabashi criticó el miedo (sic) del gobierno de Kan al crear pánico en sus decisiones y subestimar los verdaderos peligros del accidente. Es lo que sucede cuando un gobierno pusilánime cede sus prerrogativas a los intereses unilaterales de una trasnacional criminal como Tepco y su perverso lobby nuclear (Genpatsu Mura).
Kan, quien había permanecido en la catatonia, se acordó de que, más que físico y agente de patentes (sic) comprometido con los intereses de Tepco, era el primer ministro que debía tomar la suprema decisión para el bien de su nación, cuando optó por irrumpir en las oficinas de Tepco en Tokio para obligarlos a no abandonar la planta de Fukushima. Un acto heroico que juzga Funabashi: su decisión de irrumpir en las oficinas de Tepco y exigir que no se rindieran salvó a Japón; le faltó agregar que también salvó a la región de la cuenca del Pacífico (incluido México).
El director del Instituto de Ciencias Nucleares, Alejandro Frank Hoeflich, ha apoyado irrestrictamente al lobby nuclear de Japón en el caso de Fukushima (CNN, 16/3/11 y La Jornada, 16/4/11). ¿Estará de acuerdo todo el plantel académico y el alumnado de la UNAM con esta postura unilateral, que ha valido severas criticas de los lectores de La Jornada (en su propio artículo, así como en El Correo Ilustrado, 28/4/11)?
Pese al encubrimiento de la Agencia de Protección (sic) Ambiental de EU (EPA, por sus siglas en inglés), las perniciosas consecuencias de Fukushima han alcanzado la costa del Pacifico, según Joseph J. Mangano (epidemiólogo) y Janette D. Sherman (internista y toxicóloga), de la universidad de Western Michigan, en un artículo de la revista científica International Journal of Health Services (2012): Aumento inesperado en la mortalidad en EU después de la llegada de la nube radiactiva de Fukushima: ¿existe correlación? Se calculan 14 mil niños muertos en EU debido a la derrama radiactiva, pese a la necedad de la trasnacional Tepco en sostener que sus efectos tóxicos han sido contenidos. ¿Habrá alcanzado la costa mexicana del Pacífico? ¿Quién investiga? ¿Quién estará evaluando aquí –que no sea el Genpatsu Mura local– la planta de Laguna Verde, situada sobre una falla tectónica y con el mismo modelo chatarra que vendió General Electric en Japón?

jueves, 1 de marzo de 2012

Se instala la Okupa- GDF

  
A TOD@S, VEN Y OKUPA TU LUGAR EN EL ZÓCALO DE ESTA CIUDAD
Ellos nos dejaron sin trabajo, nosotros vamos a recuperarlo.
Ellos nos dejaron sin futuro, nosotros vamos a conquistarlo.
Ellos nos desalojaron, nosotros vamos a okuparlos.

BOLETÍN DE PRENSA

· OKUPA GDF toma el corazón operativo de la ciudad: Organizaciones de trabajadores se instalan, este 20 de febrero, en plantón indefinido y demandan la reinstalación de despedidos, en los portales del ayuntamiento de la ciudad de México.
La Asamblea General de Trabajadores del GDF, la Unión General de Trabajadores de México, el Sindicato por la Unidad de los Trabajadores del Instituto de Educación Media Superior y el Sindicato Único de Trabajadores de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, miembros de la Federación de Trabajadores del Distrito Federal, conjuntamente con el Congreso Popular Social y Ciudadano, dicen que no se irán hasta que se solucionen sus demandas.
La Política laboral del GDF se distingue principalmente por cerrar las puertas al derecho a la estabilidad laboral, para lo cual implementa diferentes formas de contratación, (honorarios, asimilados a salarios, eventuales ordinarios, eventuales extraordinarios, autogenerados y voluntarios), al negar sus relaciones de trabajo con cientos de trabajadores, pero esas formas de contratación están al margen de la legislación laboral. Al mismo tiempo impulsa una serie de medidas administrativas para eliminar el carácter de universalidad de las prestaciones laborales; aplicando códigos nominales irregulares o bien negando el derecho a la libre sindicalización de los trabajadores. Mientras que interviene en la vida interna de las organizaciones sindicales.

La agresión a la materia de trabajo de los trabajadores del GDF también es una constante, mediante la subrogación del trabajo con cientos de contratos con particulares en todas las Unidades Administrativas y mediante la privatización, concesión o con permisos administrativos otorgados a compañías privadas para la prestación de los servicios; además de eliminar decenas de plazas para achicar la plantilla laboral mediante el congelamiento de las mismas.
Mientras la mano de obra del propio GDF se congela, crece la plantilla de estructura creando incluso direcciones y subdirecciones con la finalidad de pagar las cuotas políticas a los que operaron para garantizar que se ganara la Jefatura de Gobierno. Estos a su vez convertidos en referentes políticos, colocaron a decenas de trabajadores en diversas unidades administrativas con los contratos de honorarios y/o asimilados a salarios, pero también dando oportunidad a que decenas de sus operadores políticos obtuvieran una plaza aunque nunca se presentarán a trabajar.
Por si fuera poco a diseñado una estrategia que tiene como finalidad justificar estas aberraciones de la que está plagada su política laboral mediante lineamientos con carácter unilateral, para legitimarse frente a los trabajadores, estos lineamientos se han impuesto a pesar de que algunos de ellos se sobreponen a la legislación laboral, incluso para el caso de organismos públicos descentralizados están por encima de los clausulados de los Contratos Colectivos de Trabajo (CCT) y para el caso del gobierno central por encima de las Condiciones Generales de Trabajo (CGT-GDF).
Amen a todas estas calamidades, impuestas como mecánica ordinaria de su política laboral en lo que va del año se han intensificado los despedidos, en el DIF-DF, SETRAVI, SACM, INVI, INMUJERES, IASIS, IEMS, DGRT, LOCATEL, DGSU, en la UACM, SEGURO POPULAR, DESARROLLO SOCIAL, CETRAM, PROTECCION CIVIL, etc., todo esto pasa a sabiendas que implica una nueva andanada de demandas laborales, sin siquiera haber cumplido a cabalidad, con las que durante toda la administración el GDF y sus dependencias perdieron ante tribunales quienes dieron la razón a los trabajadores actores de las demandas sumando un total de 7000 laudos en favor de los trabajadores que el Gobierno local se niega a cumplir cabalmente; alegando siempre insuficiencia presupuestal, pero destinando cuantiosos recursos del erario a sostener y mantener a un número indeterminado de aviadores en casi todas las dependencias de gobierno.
http://contralinea.info/archivo-revista/index.php/2011/11/13/ebrard-hoteles-whisky-langosta-y-vinos-con-cargo-al-erario/
De tal suerte, el GDF justifica su ilegalidad por falta de dinero, y no basta con que no haga caso de los ordenamientos judiciales, lo que ya de por si es grave, sino que además ignora las recomendaciones que la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal y las de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal que le hace en sendos punto de acuerdo que muchas veces han alcanzado la unanimidad de los diputados.
El GDF, también es capaz de confabular en contra de los trabajadores como es el caso de los despedidos de Inmujeres y el Sistema de Aguas de la Ciudad de México, en donde en contubernio con la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del Distrito Federal ha mantenido en el limbo jurídico sus demanda de reinstalación por más de nueve años, de igual forma a procedido con el caso de IEMS y en Desarrollo Social y muchos son los ejemplos en los que el GDF y la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, desgastan la resistencia de los trabajadores mediante tortuosos juicios en los que descargan sus demandas. Así podríamos afirmar que el principio de impartición de justicia pronta y expedita no existe en el GDF y la JLCA. En este mismo renglón podemos observar como retardan la toma de nota de los sindicatos que les son incómodos, a pesar de que mediante recuentos democráticos, estos han sido reconocidos por sus propios gremios.
Todo esto sumado a la aplicación de una malentendida “austeridad republicana”, de donde los implementos e insumos del trabajo son elementos ausentes del tiro de trabajo incluyendo los que deben servir para la protección y seguridad en el trabajo, por lo que los trabajadores se ven imposibilitados para el desarrollo optimo del trabajo y sin embargo con ingenio y sagacidad han podido paliar esta situación destacando muchísimos casos en que los propios trabajadores tienen que desembolsar de sus de por si míseros recursos para comprar insumos del trabajo.
Por todo esto, la Asamblea General de Trabajadores del GDF, la Unión General de Trabajadores de México, el Sindicato por la Unidad de los Trabajadores del Instituto de Educación Media Superior y el Sindicato Único de Trabajadores de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México; miembros todos de la Federación de Trabajadores del Distrito Federal, conjuntamente con el Congreso Popular Social y Ciudadano hemos tomado la determinación de exigir un verdadero cambio de esta política laboral como parte de los 5 ejes del “OKUPA GDF” (Plantón por tiempo indefinido), de donde se garantice:
1. ESTABILIDAD LABORAL (MEDIANTE LA BASIFICACIÓN) DE TODOS LOS TRABAJADORES.
2. CESE A LOS DESPIDOS.
3. REINSTALACION DE TODOS LOS DESPEDIDOS.
4. APLICACIÓN DE DIGITOS SINDICALES Y LIBERTAD SINDICAL.
5. ELIMINACIÓN DE TODOS LOS CODIGOS IRREGULARES (CT, CP, CF).
6. HOMOLOGACION SALARIAL (A TRABAJO IGUAL SALARIO IGUAL).
7. RESPETO Y RECONOCIMIENTO A LAS ORGANIZACIONES DE LOS TRABAJADORES.
8. CUMPLIMIENTO CABAL DE TODOS LOS LAUDOS LABORALES QUE LOS TRABAJADORES HAN GANADO.
9. APLICACIÓN DE LAS RECOMENDACIONES DE LA CDH-DF Y DE LA ALDF.
10. OTORGAMIENTO DE IMPLENTOS E INSUMOS DEL TRABAJO.
11. ALTO AL PROCESO DE PRIVATIZACION DE LOS SERVICIOS PUBLICOS.
¡NI UNA LUCHA AISLADA MÁS!
agt-gdf@hotmail.com

miércoles, 29 de febrero de 2012

2° Comunicado Okupa GDF

2o. Comunicado del Okupa GDF

de Okupa Gdf, el jueves, 23 de febrero de 2012 a la(s) 23:24 ·
A LOS HABITANTES DE LA CIUDAD DE MÉXICO


Con forme se acerca el acto conmemorativo de nuestra Bandera Nacional, 24 de febrero, también se incrementan las posibilidades de que fuerzas federales (PFP y EMP) y del Distrito Federal (SSP) desalojen el Okupa-GDF.  Históricamente estos desalojos se realizan con lujo de violencia, se agrede indiscriminadamente a niños, mujeres y hombres, sin importar su condición física ni su edad.

Pese al notorio clima de incertidumbre, como lo patentizamos en el Manifiesto del Ocupa GDF, sostenemos nuestra disposición al dialogo, por lo cual hemos mantenido constante comunicación con el Subsecretario de Gobierno: Juan José García Ochoa, quien nos ha presentado algunas propuestas de solución.  No obstante ello, consideramos que el ofrecimiento del GDF es insuficiente, ya que no resuelve uno de los puntos nodales del Okupa GDF:  Entrevistarnos Primero con el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Lic. Marcelo Luis Ebrad Casaubon, para acordar los términos en que habrá de resolver las agendas de las organizaciones de este Okupa GDF.

No es intención nuestra obrar en prejuicio de las instituciones político-administrativas de la ciudad, con ello conminamos al Jefe de Gobierno a que, en un acto de buena voluntad, se comprometa públicamente a debatir los puntos fundamentales que le planteamos y, derivado do de los acuerdos alcanzados dar puntual solución a las agendas de las organizaciones integrantes de este Okupa GDF.

Reiteramos nuestra decisión de no abandonar este espacio público que hoy ocupamos en forma pacífica, hasta no debatir directamente con el Jefe de Gobierno y alcanzar acuerdos sustanciales en torno a los siguientes temas:

1. Programas Sociales.  Ampliar la cobertura de los actuales y crear los que sea menester instituir en beneficio de los habitantes de la ciudad.

2. Política Laboral.   Rectificación del accionar de las Juntas Local y Federal de Conciliación y Arbitraje, acatamiento de los laudos emitidos por la JLCyADF y el TFCyA, cesar los Despidos injustificados en las dependencias oficiales y reintegrar a sus puestos a los trabajadores que a la fecha han suspendido.

3. Política de Vivienda.   Reorientar la política de vivienda desarrollada por el Instituto de Vivienda del Distrito Federal. Impedir su privatización y aplicar un Programa Emergente de Asignación Extraordinaria de Recursos Fiscales para la vivienda de interés social.

4. Privatizaciones.  Detener el acelerado proceso de entrega a particulares, del patrimonio público.  Acatar las recomendaciones que la CDHDF he emitido en relación a megaproyectos como la Super Vía Poniente, replantear lo esquemas de funcionamientos de los que ya operan u operaran en próximas fechas y cancelar definitivamente los que planea realizar.

5. Criminalización de las Protestas Sociales.  Cesar la persecución político-judicial en contra de las organizaciones sociales y sus dirigentes.
http://contralinea.info/archivo-revista/index.php/2011/11/13/c4i4-los-espias-del-gdf/
Finalmente, recalcamos que la solución a nuestras demandas depende de la disposición que las autoridades capitalinas tengan al respecto.  Paternizamos que sin importar de donde provengan, será responsabilidad del GDF cualquier agresión en contra del Okupa GDF.


F R A T E R N A L M E N T E
Okupa GDF

lunes, 30 de enero de 2012

Antes leían. Hermann Bellinghausen

Antes leían
Hermann Bellinghausen
Sentir nostalgias que uno nunca hubiera previsto es otro síntoma del mal estado de la República. Algo significaba que aún en los periodos más nefastos de la revolución institucional los gobiernos contaran con los servicios de autores y pensadores de real estatura y uno pudiera adivinar en los presidentes alguna formación humanística, referentes culturales básicos. Álvaro Obregón, aquel generalote norteño, no debió ser muy letrado, pero (le atribuyen) podía recitarle de memoria pasajes de La suave patria a Ramón López Velarde.
Adolfo López Mateos se formó en la campaña de José Vasconcelos; algo se le pegaría de su mentor, uno de los prosistas más geniales de nuestro canon. Mantuvo en su gabinete al poeta y eterno funcionario (desde Manuel Ávila Camacho) Jaime Torres Bodet y se lo heredó todavía a Gustavo Díaz Ordaz, quien además reclutaría a Mauricio Magdaleno y Agustín Yáñez. Olvidaditos como están, los tres autores dejaron páginas memorables.

José López Portillo, más allá de su frivolidad, daba muestras convincentes de haber leído Don Quijote de la Mancha (con rasgos incluso siquiátricos), y podemos pensar que sus libros los escribía él. Su hermana y funcionaria Margarita pergeñaba libros completos. Ambos descendían del autor de La parcela, José López Portillo y Rojas, apreciable novelista del realismo. Otro que tuvo hermana literata fue López Mateos: Esperanza, la traductora y casi alter ego del misterioso Bruno Traven.
Esperanza López Mateos.

El recuento se impone ante la penosa orfandad intelectual de los gobiernos recientes, en particular los panistas. (Uta, apenas la semana pasada Felipe Calderón se quiso untar tantita intelectualidá aprovechándose de ¡Paolo Coelho!) Con Vicente Fox comienzan los gobernantes formados en manuales de autoayuda y cursos de mercadotecnia, y si el próximo presidente va a tener el músculo intelectual de Enrique Peña Nieto, pues ya nos amolamos.
Pocos indicios de cultura revelaba Díaz Ordaz, pero incluso para los trabajos de cañería profunda contra los estudiantes del 68 empleó al brillante filósofo Emilio Uranga y la notabilísima narradora Elena Garro. Su represión fue respaldada por Martín Luis Guzmán (otro grande), y lo premió con una senaduría en 1970. Todos aquellos gobiernos mantuvieron en sus filas al poeta de Muerte sin fin, José Gorostiza, que lo mismo fue canciller que presidente de la Comisión Nacional de Energía Nuclear.

Luis Echeverría tampoco mostró ser muy acá, pero heredó el instinto de Obregón y López Mateos, y tras el desprestigio del 2 de octubre en Tlatelolco –que dentro del gobierno sólo el embajador Octavio Paz había confrontado–, atrajo intelectuales y escritores a montón; logró llenar con ellos un charter y llevárselos a Buenos Aires para presumirlos. Le trabajó el espléndido Ricardo Garibay, y Fernando Benítez, con el aplauso de Carlos Fuentes, acuñó eso de Echeverría o el fascismo (y por entonces escribió Los indios de México).
Incontables diplomáticos dieron lustre a los gobiernos posrevolucionarios: Alfonso Reyes, Gilberto Owen, Jaime García Terrés, Rodolfo Usigli, Rosario Castellanos, Hugo Gutiérrez Vega y tantos otros. Los panistas lo mejorcito que han podido exportar es Jorge Volpi, y ni siquiera de embajador. Hugo Hiriart, uno de nuestros mejores escritores vivos, en Nueva York representó culturalmente a Fox, desafío titánico si los hay; el gobierno no acusó ni la menor impronta de ese privilegio.
Senadores priístas fueron Carlos Pellicer y Andrés Henestrosa. Jaime Sabines, diputado. Salvador Novo paseó su ingenio por Palacio Nacional durante sexenios. Juan Rulfo se refugió largamente en una oficina gubernamental. Otro México. Y otro PRI: ni Jesús Reyes Heroles ni Enrique González Pedrero escribieron Dios mío, hazme viuda por favor.
Con el neoliberalismo llega la simulación intelectual, pero aún Carlos Salinas se rodea de doctores y escritores. Imitando a Echeverría, atrae a una intelectualidad que legitime lo que las urnas le negaron. Los Roberto Blanco Moheno y Luis Spota de la hora habían pasado por el Colegio de México.No que ahora esto es un páramo sin Pedro. El nulo compromiso con el lenguaje y la ausencia de barniz literario, artístico o filosófico caracterizan a los gobernantes, meros gerentes rodeados de nerds de universidades católicas o tecnócratas con credenciales de Yale pero sensibilidad de abarrotero, de policía, de nuevo rico. ¿Nunca más mereceremos un gobierno como el de Benito Juárez, apalancado en el poderío intelectual y literario de la mejor generación del siglo XIX?
Enrique Peña Nieto y Ernesto Cordero
Hasta nuevo aviso, todo tiempo pasado fue mejor. Autoritarios, corruptos o asesinos, los presidentes conocían el ABC y, a su modo, eran estadistas. El siglo XXI mexicano está produciendo puros burros y títeres de reality show. Ahí están los videoclips de Calderón haciéndose el turista extremo, o su posible sucesor tartamudeando en público ante preguntas que debió aprender a responder en la secundaria.
No, sí está cabrón.

Texto del periodico La Jornada. Lunes 30 de enero de 2012